Como si no tuviera bastante con los problemas de gestión, Mauricio Macri suma otra preocupación: Boca, el club de sus amores, y en el que originó su carrera política, será otro de los focos en los que tendrá que poner atención durante el año próximo.
La elección de autoridades de Boca Juniors se realizará a fin del año próximo, apenas unas semanas después de que se realicen los comicios nacionales, por lo que gran parte de las campañas se realizarán en paralelo.
Si bien la gestión de Daniel Angelici cuenta con buenos índices de aprobación, la salida del “tano”, dejaría un espacio que aún no tiene candidato natural para reempalzarlo. Esta semana Angelici le dio un fuerte apoyo a Christian Gribaudo, actual secretario general del club y titular del Instituto de Previsión Social en la gestión de María Eugenia Vidal. “Yo tengo una persona que le confió mucho que es el actual secretario general del club, Christian Gribaudo», aseguró el actual presidente de Boca en una entrevista en A24, en la que aclaró que la discusión electoral aún no está en agenda.
Gracias a mis compañeros de Comisión Directiva. #HayEquipo pic.twitter.com/hz4oxuPbiZ
— Christian Gribaudo (@GribaudoC) October 12, 2018
«Hablamos con todas las agrupaciones oficialistas, que son diez, y dijimos que a partir de enero nos sentábamos a hablar y abríamos el año electoral», amplió el Angelici, luego de darle un espaldarazo a Gribaudo e insistió con que van a “a discutirlo dentro del oficialismo. Va a haber un candidato y hay dos o tres que están en condiciones, que tienen la pretensión de ser. Lo vamos a discutir el año próximo. No nos vamos a adelantar».
Otro de los que podría ser presidenciables es el actual vicejefe de Gabinete, Andrés Ibarra, quien ya tiene experiencia en la gestión boquense, donde acompañó a Mauricio Macri, como gerente marketing y también como gerente general, cuando este fue presidente del club. Finalmente, otro de los que sonó fue “Fran” Quintana, quien ocupa la vicepresidencia primera de la Legislatura Porteña y además es el presidente de la Asamblea de Boca Juniors.
El problema que tienen en común los candidatos es que no miden; en una encuesta a la que accedió en exclusivo Informe Político, realizada en los últimos días de septiembre, se registró una intención de voto del 3% para Gribaudo, y 1,5% para Ibarra, muy lejos de los índices de aprobación que tiene la gestión de Angelici.
A su vez, el ídolo de Boca, enemistado con Angelici y el propio Macri, Juan Román Riquelme, tiene adhesiones de más del 50% y podría romper el esquema. “Llevamos muchos años sin ganar la Copa (Libertadores). La verdad es que nunca pensé que iba a pasar tanto tiempo. El presidente (Daniel Angelici) intenta hacer las cosas bien desde hace siete años, me parece. Tengo que pensar en ser presidente. Si tengo que tomar la responsabilidad espero que el hincha me dé el mismo tiempo y ganar muchos títulos», lanzó con diplomacia e ironía Riquelme.
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Riquelme mantiene una cordial relación con otro de los ex presidentes de Boca, Jorge Amor Ameal, quien en el sondeo al que accedió este medio tiene un 7% de intención de voto; mismo porcentaje que obtiene uno de los vicepresidente actuales, Royco Ferrari, quien maneja las Peñas de las institución, permitiéndolo tener un trato fluido y directo con los socios. Un poco más arriba, pero también muy lejos de Riquelme, se posiciona José Beraldi, con el 10%. En 2011, cuando Angelici fue electo por primera vez presidente de Boca, Ameal y Beraldi compartieron formula y perdieron contra el “tano” por 55% a 45%; cuatro años después, Angelici fue reelecto con el 43%, mientras que Ameal por un lado obtuvo el 30% y Beraldi por otro el 25%.
Desde el macrismo si bien admitieron que los números son esquivos, confían en que la maquinaria oficialista, más la buena administración de Angelici y algún título en lo que le queda de mandato, podrían darle al candidato del espacio el impulso necesario para mejorar los exiguos números actuales, no obstante, la mayor preocupación pasa por lo que haga Riquelme, quien de presentarse, podría arrebatarles la conducción del club.
