Desde el Grupo Vicentin aseguran que no tiene ningún asidero la reciente denuncia de varios bancos internacionales en su contra, que denunciaron presuntas estafas y se presentaron como querellantes en la causa que investiga al grupo empresario. Aseguran que la nueva denuncia forma parte de una estrategia para bloquear el proceso concursal y retomar el proyecto de expropiación de la empresa.
La nueva investigación contra el grupo, una denuncia presentada por el comité Ad Hoc de Acreedores Internacionales de la enpresa (que reclaman deudas por más de 500 millones de dólares) ante la Fiscalía de Delitos Económicos de Rosario después de que Vicentin finalmente entregara su balance, busca establecer si la empresa presentó información financiera falsa para obtener millonarios créditos en dólares en las entidades bancarias denunciantes.
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Desde la agroexportadora sostuvieron que la denuncia “no tiene asidero alguno” y que a los bancos “no les interesan los procesos legales ante los tribunales nacionales sino su repercusión en los medios”. En la misma línea, desde la empresa (también investigada por la obtención de millonarios créditos irregulares con la gestión macrista del Banco Nación) afirman que la nueva denuncia “confirma las amenazas realizadas por dichos bancos en diciembre en caso de que la empresa se concursara, no pagara de inmediato el monto reclamado, o no aceptara la propuesta de venta y desguace liderada por uno de dichos bancos”.
El directorio de Vicentin considera que el objetivo es “buscar su expropiación a través de un intenso lobby ante funcionarios públicos para que el Estado Nacional y Provincial les pague su crédito no respetando el proceso concursal en curso”. “Es inadmisible que la banca internacional utilice cuestiones no probadas o meras insinuaciones cómo modo de presión mediática para obstaculizar el proceso concursal demorando cualquier salida”, sostuvieron desde la cuestionada empresa santafecina, anticipando que “no cederán frente a amenazas o presiones indebidas de esta naturaleza”.
