El proyecto de ley para impulsar que haya alcohol cero al volante en la ciudad de Buenos Aires, elaborado por el legislador Eugenio Casielles (Consenso Federal), generó controversias entre su autor y la gestión Larreta, que respondió a través del secretario de Transporte, Juan José Méndez.
El funcionario porteño expresó que si bien están de acuerdo en brindar el debate público «a la hora de la fiscalización, cuando corremos el límite a cero, implica una pérdida de capacidad de detectar aquellos conductores que efectivamente están violando los límites que ponen en riesgo a la ciudadanía”.
https://twitter.com/EugeCasielles/status/1395814222248960006
Y, en ese sentido, destacó que “tenemos la capacidad de hacer 400 mil controles al año, y si en esos controles acarreamos autos por tener 0,2 o 0,4 de alcohol en sangre, que está por debajo del límite de 0,5 que según la Organización Mundial de la Salud (OMS) no implicaría un riesgo, va a pasar que estamos dejando de controlar otros vehículos que potencialmente podrían tener un nivel de alcoholemia que ponen en riesgo a toda la ciudadanía”.
La replica del diputado porteño de Consenso Federal no tardó en llegar. A través de su cuenta de Twitter, indicó: «Sec. de Transporte, su declaración no da a lugar. La falta de capacidad de control no tiene que ver con el límite de tolerancia. Miles de autos se controlan sin conocer el estado del conductor. Los controles se hacen igual, cualquiera sea el límite».
«Organizaciones internacionales se manifestaron en muchos sentidos por este tema. La realidad de los números es que, en los lugares donde hay alcohol 0, bajan los accidentes causados por esto en un 35%. No hay discusión», agregó.
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La iniciativa que realizó Casielles apunta a que, al momento de conducir un vehículo en la Ciudad, los conductores deban tener 0% de alcohol en sangre. “Motiva la presentación de este proyecto la enorme cantidad de accidentes viales que, de manera periódica y concurrente son protagonizados por conductores alcoholizados. Este tipo de tragedia concluye con la vida de niños, hombres, y mujeres, sin lugar a la distinción, por lo que es fundamental establecer una normativa que sea ejemplificadora y clara. El rol pedagógico que tiene la ley no puede subestimarse”, explicó el integrante del Parlamento.
Y destaca que mueren por año 5500 personas en siniestros viales en la Argentina. Por eso, “mirando solamente los datos sobre el alcohol y los accidentes viales no se puede tener tolerancia en este tema. Según la Organización Mundial de la Salud cada año fallecen alrededor de 1,35 millones de personas como consecuencia de siniestros viales en todo el mundo”.