Cristina apuntó duro contra la Corte en el balance del primer año de gestión

La vicepresidenta Cristina Fernández publicó en sus redes oficiales el balance del primer año de gestión, a horas de cumplirse. Allí destacó el rol del Senado en plena pandemia, y elogió brevemente el manejo de la emergencia sanitaria del presidente Alberto Fernández, aunque con críticas a la situación heredada del expresidente Mauricio Macri.

La renegociación de la deuda externa y los avances de Guzmán también sumaron a lo positivo que contrarresta las profundas críticas que la vicepresidenta apuntó contra los integrantes de la Corte Suprema de la Nación.

«Representado por la Corte Suprema de Justicia de la Nación, la actuación de ese poder no hizo más que confirmar que fue desde allí, desde donde se encabezó y dirigió el proceso de Lawfare. Esa articulación mediática-judicial para perseguir y encarcelar opositores, se desplegó en nuestro país con toda su intensidad desde la llegada de Mauricio Macri a la Presidencia de la Nación y, lo que es peor: aún continúa», manifestó la expresidenta.

«Y que a nadie se le ocurra tergiversar mis palabras con titulares diciendo que pretendemos una Justicia adicta. Todo lo contrario: somos la fuerza política que en el 2003, con el 22% de los votos, denunciamos la extorsión de lo que se conocía como la “mayoría automática de la Corte”, dando inicio a un proceso virtuoso que culminó con la Corte Suprema más independiente y prestigiosa de las últimas décadas», agregó, en una extensa nota que describe a Ricardo Lorenzetti como «el que se fotografiaba con el Juez brasileño Sergio Moro y con Claudio Bonadío. El primero -Sergio Moro- es el que sin pruebas metió preso al ex presidente del Brasil, Inacio Lula Da Silva, impidiéndole ser candidato a presidente y posibilitando la llegada al poder de Jair Bolsonaro, quien lo premió designándolo, en un escándalo sin precedentes, como su Ministro de Justicia. El segundo nunca rindió un examen para ser magistrado e integro la célebre lista de los ‘jueces de la “servilleta'».

Los misiles contra Lorenzetti continuaron: «Este mismo integrante de la Corte, el que se fotografiaba con Moro y Bonadío, fue Presidente de ese cuerpo hasta el año 2018 y en una reunión de jueces federales de Comodoro Py, les aseguró que todas las instancias superiores les iban a confirmar y convalidar todas las decisiones de primera instancia que dictaran contra los dirigentes y ex funcionarios kirchneristas. Lawfare al palo».

Alberto evaluó su primer año de gestión y le pegó a Macri

Tampoco faltaron las críticas para Elena Highton de Nolasco, propuesta por Néstor Kirchner en 2004 como jueza de la Corte y la primera mujer en ocupar dicho espacio durante un Gobierno democrático, sobre quien dijo que «no sólo no renunció a su cargo al cumplir los 75 años de edad -como lo hiciera el Dr. Zaffaroni-, sino que además recurrió a un Juez de primera instancia para que le permitiera permanecer en el cargo en acuerdo con el Gobierno de Cambiemos -que no apeló aquella resolución judicial- y en abierta violación a la jurisprudencia de la misma Corte Suprema y a lo dispuesto por la Constitución Nacional».

En la misiva de balance, referida principalmente a la actuación del Poder Judicial, tuvo su espacio el rol ocupado por el Gobierno de Mauricio Macri en la conformación de la actual Corte Suprema. En ese sentido cuestionó que durante el macrismo se completó la fotografía de la Corte actual a través de un Decreto de Necesidad y Urgencia mediante el cual «se intentó nombrar a Carlos Rosenkrantz y Horacio Rosatti como miembros». «Lo más terrible de aquel episodio fue que quienes debían garantizar el cumplimiento de la Constitución y las leyes en todo el País, aceptaron ser designados por decreto sin cumplir lo que prescribe la Constitución Nacional y las leyes, que exigen un procedimiento determinado y preciso para cubrir las vacantes de la Corte», criticó.

«El macrismo en el Poder completó la fotografía de la Corte actual, cuando a través de un Decreto de Necesidad y Urgencia intentó nombrar a Carlos Rosenkrantz y Horacio Rosatti como miembros de la Corte Suprema», prosiguió la vicepresidenta, quien aseguró que «lo más terrible» fue que «quienes debían garantizar el cumplimiento de la Constitución y las leyes en todo el país», aceptaran la designación por decreto.

Los cuestionamientos apuntaron duro contra Rosenkrantz, a quien describió como «uno de los dueños del estudio jurídico cuya cartera de clientes esta conformada por los principales grupos empresarios argentinos y extranjeros en el país», quien en 2018 fue designado presidente del máximo tribunal de Justicia de la Nación.

«A nadie debería extrañarle entonces, no sólo que el Lawfare siga en su apogeo, sino que además, se proteja y garantice la impunidad a los funcionarios macristas que durante su gobierno no dejaron delito por cometer, saqueando y endeudando al país y persiguiendo, espiando y encarcelando a opositores políticos a su gobierno», acusó la expresidenta, que continuó: «Tampoco deberíamos extrañarnos si esta Corte, que consintió alegremente el mayor endeudamiento del que se tenga memoria a escala planetaria con el FMI, empieza a dictar fallos de neto corte económico para condicionar o extorsionar a este gobierno… O lo que es peor aún: para hacerlo fracasar».

La vicepresidenta recordó que «De los tres poderes del Estado, sólo uno no va a elecciones. Sólo un Poder es perpetuo. Sólo un Poder tiene la palabra final sobre las decisiones del Poder Ejecutivo y del Poder Legislativo».

Scroll al inicio