Esta semana el Banco Nación emitió una serie de títulos de deuda con diferentes bancos públicos a una tasa de entre 400 y 450 puntos menos que la que se le concedió al Tesoro Nacional días atrás, lo que implica un quebranto de más de 42 millones de dólares para la entidad bancaria nacional.
El ministro de Hacienda Nicolás Dujovne vuelve a utilizar al principal banco público del país para conseguir financiamiento, esta vez con 40 mil millones de pesos a una tasa muy inferior a los promedios de mercado. Así, por ejemplo, mientras que un reciente préstamo a la Ciudad de Buenos Aires se financió con tasa Badlar +653 puntos, el préstamo a Dujovne fue de Badlar +200 puntos básicos.
La diferencia entre una tasa y otra implica una pérdida de unos 1800 millones de pesos (42 millones de dólares al tipo de cambio actual) para el banco público presidido por Javier González Fraga. Según publica el portal La Política Online, fuentes del sector bancario reconocieron que “prestar a menos de 600 es un regalo”. Y añadieron: “Hoy si Fiat sale a pedir plata toma Badlar más 1.000”. De todos modos, las líneas de crédito a privados se encuentran casi cortadas por sus tasas superiores al 70% (de las más altas en el mercado).
Francisco Uriburu, analista de mercado, consideró al respecto: “Es un escándalo, el banco está descapitalizado y se da el lujo de subsidiar al gobierno. La misión del Nación por carta orgánica es dar créditos de fomento que en estos momentos de altas tasas son indispensables dada la gravedad del desfinanciamiento de las pymes”.
El analista financiero Christian Buteler concluyó: “Hoy el Tesoro se financia con el Nación porque el FMI ya no te permite financiarte con el Banco Central por el riesgo inflacionario. Como el Nación no emite dinero, no te repercute en la inflación, pero desfinancias al sector privado”.
