Este sábado la ministra de Mujeres, Género y Diversidad Elizabeth Gómez Alcorta terció en la polémica entre el presidente Alberto Fernández y la Corte Suprema de Justicia en torno a las capacitaciones obligatorias sobre una perspectiva de género establecidas por la llamada Ley Micaela. La funcionaria cuestionó el comunicado del Máximo Tribunal afirmando que se están incumpliendo premisas de la ley, que establece que el Ministerio que encabeza debe “capacitar a los tres poderes”.
Este viernes, el presidente Alberto Fernández había denunciado que, a pesar de reiterados pedidos al presidente de la Corte Carlos Rosenkrantz para que el Máximo Tribunal se sume a las capacitaciones establecidas por la Ley Micaela, sólo recibieron “silencio” como respuesta. Luego desde la Corte respondieron con un comunicado donde afirman que el cuerpo lidera “desde el año 2010 la capacitación en Perspectiva de Género en el Poder Judicial”, con un proyecto “inédito en el mundo”, reconocido por Naciones Unidas.
Alberto cuestionó al presidente de la Corte por el traslado de jueces
Sin embargo, aunque Gómez Alcorta reconoció que la Corte aplica sus propias políticas de género, insistió en que “es el único de los máximos poderes del Estado -que están obligados a capacitarse- que no lo hizo”. La funcionaria detalló que según la Ley, su cartera debe “capacitar a las máximas autoridades de los tres poderes”, para que luego “cada poder capacite a sus propios funcionarias y funcionarios”. El requisito ya se cumplió con todo el Poder Ejecutivo y con los integrantes de las Cámara de Diputados y Senadores.
“Hemos intentado capacitar a la Corte Suprema, es la obligación que tenemos por ley, no es algo que podemos elegir o no. Frente a las dificultades le enviamos una nota, el 23 de junio, al presidente de la Corte, se la mande yo, diciéndole que en el marco de la ley teníamos que hacer la capacitación a la Corte, para los ministros y la ministra”, explicó Gómez Alcorta. Luego denunció que todos los intentos de contacto, incluyendo una propuesta de capacitación de manera virtual por entender “que hay algunos de los ministros de la Corte que son grandes y que estamos en el marco de la pandemia”, no lograron “ninguna respuesta desde hace tres meses”.
Después de descartar cualquier tipo de “intencionalidad política” en relación con otros temas de tensión con la Corte por parte del presidente Alberto Fernández, Gómez Alcorta consideró que las críticas planteadas por el mandatario fueron “fundadas”. “La Corte tiene que capacitarse al igual que todos y todas. De las máximas autoridades, la única que está en deuda es la Corte Suprema”, remarcó. Y concluyó: “Si la Corte se capacita, también es un mensaje para todo el Poder Judicial; del mismo modo que si el Presidente se capacita, es un mensaje para todo el Poder Ejecutivo”.