Durante el Segundo Encuentro Nacional de Intendentes, que este jueves convocó a unos mil jefes comunales de Cambiemos de todo el país, se volvió a plantear lo que hoy es uno de los principales debates que atraviesa a la alianza de gobierno en vistas al crucial año electoral 2019: la posibilidad de desdoblar las elecciones provinciales y nacionales, para mejorar las chances de reelección en el territorio bonaerense. Esta vez no participaron intendentes peronistas (salvo Alejandro Granados, de Ezeiza), como en el encuentro anterior.
El cierre del encuentro estuvo a cargo del jefe de Gabinete Marcos Peña y del ministro del Interior Rogelio Frigerio (la apertura quedó en manos del presidente Mauricio Macri), quienes representan dos posiciones opuestas en relación al desdoblamiento electoral, con Frigerio representando al sector más activo que impulsa esa estrategia, que contaría con el apoyo de la propia gobernadora María Eugenia Vidal. Según informa el diario Clarín, “un importante funcionario nacional que trabaja en el Conurbano” habría asegurado que también el jefe de Gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta acordaría con la estrategia para provincia mientras que en la Ciudad de Buenos Aires, con la reforma del código electoral ya concretada, se unificarían las elecciones con las nacionales.
De todos modos, los discursos de cierre no dejaron traslucir estas diferencias, enfocándose en el eje de la gestión (Peña planteó con más claridad la estrategia de enfocar en la gestión y hacer una campaña electoral “corta”). Pero el debate por el desdoblamiento cruzó muchas de las charlas y encuentros informales durante el evento, mientras Frigerio recibía a intendentes en una oficina improvisada.
Entre los argumentos a favor del desdoblamiento se especula con la posibilidad de sumar unas 30 intendencias bonaerenses a las 69 que ya controla Cambiemos (6 en el Conurbano). En caso contrario, considerando que la posible candidata opositora sea la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner, se podría generar un efecto arrastre de la elección nacional a las locales que podría lograr que se pierdan municipalidades hoy en manos del oficialismo, como la de Quilmes.
Martín Yeza, intendente de Pinamar, consideró al respecto: “No estoy de acuerdo con que la gente vote tantas veces, sí considero que habría que eliminar las PASO, al menos las de elecciones intermedias”. Esta línea de eliminación de las PASO es impulsada, entre otros, por el primo del Presidente e intendente de Vicente López Jorge Macri (que no estuvo presente en el encuentro).
Desde el Frente Renovador se impulsaba como estrategia para la provincia de Buenos Aires un desdoblamiento de la elección de gobernador de las de intendentes, plan que se estaba negociando con el oficialismo bonaerense a cambio del apoyo del massismo al presupuesto provincial en la Legislatura, pero que si se avanzara en el desdoblamiento nacional ya perdería mucha fuerza porque es improbable que se quiera convocar a tres instancias comiciales separadas por unas pocas semanas.