La Casa Blanca posee la sospecha de que Irán derribó el avión ucraniano que se estrelló poco después de despegar del Aeropuerto Internacional Imán Jomeini en Teherán, tal como afirman medios estadounidenses que han dialogado con funcionarios.
Según el presidente Donald Trump, «alguien se pudo haber equivocado y nosotros no fuimos». «Tengo mis sospechas. Es algo trágico cuando veo eso, es algo trágico. Pero alguien podría haber cometido un error en el otro lado», mencionó el mandatario. El presidente, además, señaló que no cree que se haya tratado de un «problema mecánico». Según su versión, «sucedió algo terrible».
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«Estaba volando en un vecindario bastante duro. Podrían haber cometido un error», añadió Trump. El avión volaba rumbo a la capital de Ucrania, Kiev, con 176 personas a bordo: 82 iraníes, 63 canadienses, 11 ucranianos, 10 suecos, cuatro afganos, tres británicos y tres alemanes. Todo ellos fallecieron en el accidente.
Rápidamente, desde el Consejo de Seguridad Nacional y Defensa de Ucrania indicaron que entre las posibles causas del accidente aéreo está «un ataque de misiles». No solo eso: el organismo también baraja las hipótesis de un ataque terrorista o la explosión del motor debido a un fallo técnico de la aeronave.
En tanto, el jefe de la Organización de Aviación Civil de Irán, Ali Abedzadeh, calificó de «rumores ilógicos» las versiones que se han dado, tanto de parte de Ucrania, como de funcionarios y medios estadounidenses sobre el derribo, con misiles, del avión.
