El presidente de la OEA Luis Almagro, acusó a los dos argentinos que invitó a Bolivia como veedores, de ser espías en la auditoría que realizaron en las elecciones. Santiago Eguren y Gerónimo Ustarroz, respondieron asegurando que «es una locura»,y acusaron al jefe de la OEA de preparar un golpe de Estado.
«Estos días incluso nos enteramos que había dos espías argentinos en la misión de auditoría, lo cual es un despropósito. No eran técnicos con capacidades electorales. Eso no se hace así, es inmoral», se quejó Almagro.
A lo que Ustarroz respondió que «no sabemos si hubo fraude. Pero no tengo dudas es que hubo a partir de eso una organización de un golpe de Estado. Después de estar unos días ahí me quedó claro que estuvo muy bien organizado».
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«Nosotros tenemos que salir a responderle, no era un secreto nuestra presencia en Bolivia. Acusarnos de espías en una locura. Que el secretario general de la OEA salga tan irresponsablemente cuando ellos nos invitaron denota una irresponsabilidad y una incapacidad muy grande. Ellos redactaron un informe que ayudó con lo que pasó en Bolivia. Es gravísimo», afirmó Ustaroz en declaraciones a La Nación.
«Es llamativo que diga que éramos espías cuando ellos nos contactaron. Tengo los whastapp, mails y los cheques con los que nos pagaron. Dormíamos en el mismo hotel que ellos, comíamos y desayunábamos juntos. Somos apoderados del Frente de Todos, no somos dos desconocidos. Es ridículo lo que dijo Almagro», se excusó.
«Los sobrepasó los efectos y la realidad en Bolivia. Ellos sacaron el informe anticipadamente y desencadenó una locura con muertos en las calles. No decimos que el informe que presentaron sea falso, sino que no aplicaron metodológicamente las herramientas que tenían que realizar», acusó Ustarroz.
«La OEA hizo una auditoría que emitió un dictamen preliminar, lo apuraron, y las consecuencias están a la vista. Ahora, si mienten en algo tan burdo como acusarnos a Santiago y a mí de espías, los informes técnicos me hacen dudar», cerró.
