En la Legislatura de la Ciudad, el oficialismo descartó de plano la creación de una Oficina Anticorrupción, que propuso el Frente de Todos, y se dispone a avanzar en un Régimen de Integridad Pública, con el objetivo de «controlar» y brindar «transparencia» al Ejecutivo que lidera Horacio Rodríguez Larreta.
Este proyecto de la coalición Vamos Juntos fue elaborado por Cecilia Ferrero y debatido en una comisión conjunta de Asuntos Constitucionales, Presupuesto, Hacienda, Administración Financiera y Política Tributaria, y Legislación General. Obtuvo dictamen y será tratado en el recinto el próximo jueves.
Ferrero indicó en su cuenta de Twitter que «tras meses de trabajo, consensuamos una ley que brinda herramientas con altos estándares de transparencia para los funcionarios públicos. ¡Muy agradecida por el consenso logrado!».
Hoy despachamos en @LegisCABA el proyecto de ley, de mi autoría, de Integridad Pública de la Ciudad.
Tras meses de trabajo, consensuamos una ley que brinda herramientas con altos estándares de transparencia para los funcionarios públicos. ¡Muy agradecida por el consenso logrado!. pic.twitter.com/K5q1GuDdl0— Cecilia Ferrero (@ceciliaferrero_) November 6, 2020
Para Natalia Fidel (VJ) «no basta con una ley que declara principios, en la Legislatura de la Ciudad tenemos la ley de acceso a la información pública y generamos la institucionalidad». Desde su visión, «es un gran avance crear la oficina de integridad y al ser una ley tan grande tiene que dejar algo en el proceso, por eso felicito a todos en esta construcción de consensos».
Desde el Frente de Todos criticaron duramente lo sucedido. Primero, señalaron que no tomaron en cuenta nada de lo propusieron y que la Ciudad necesita una Oficina Anticorrupción «independiente y que investigue cualquier irregularidad en ejercicio de la función pública».
Para el bloque opositor, una oficina de Régimen de Integridad Pública “es una iniciativa limitada que no cumple con el espíritu de nuestro proyecto que busca establecer una Oficina Anticorrupción para investigar, querellar y prevenir delitos en la función pública y que sea independiente del poder de turno”.
Según Roberto, la propuesta parlamentaria que tuvo dictamen en el plenario de las comisiones de Asuntos Constitucionales, Presupuesto y de Legislación General y que tiene preferencia para ser tratada en el recinto de la Legislatura en la próxima sesión: “Se centra meramente en el armado de oficinas administrativa, que de hecho ya existen y son autoridad de aplicación de la actual ley de Ética, dejando de lado las facultades investigativas y la posibilidad de querellar. Además, es un retroceso respecto de la Ley vigente que establece que los cargos son por concursos públicos y lo que ahora proponen es que sea designado a dedo por la autoridad que debe ser controlada”.
El @gcba avanza en un Régimen de Integridad Pública que no será independiente del poder de turno.
Es un retroceso respecto a la Ley vigente, que establece que los cargos son por concursos públicos. Ahora quieren designarlos a dedo por la misma autoridad que debe ser controlada. pic.twitter.com/naGyeQXRCf
— Santiago Roberto (@sroberto_ok) November 6, 2020
Por otro lado, Roberto sostuvo «los diputados del PRO no tomaron ninguna de las propuestas de nuestro bloque para crear una Oficina Anticorrupción que investigue, querelle y prevenga las irregularidades cometidas en la función pública. En lugar de eso, y aprovechando la mayoría que tienen en todas las comisiones, le dieron dictamen a su proyecto de Régimen de Integridad Pública que es dependiente del poder de turno ya que la persona a cargo será nombrada por el Jefe de Gobierno”.
El diputado Roberto, que es integrante de la comisión de Asunto Constitucionales, recordó que “hace 2 años que venimos pidiendo el tratamiento del proyecto que presentamos para que la Ciudad tenga una Oficina Anticorrupción que cuente con legitimación procesal, independencia funcional y autarquía financiera”.
Para finalizar, Roberto aseguró: “Con la iniciativa presentada por los diputados que responden a Larreta, la Ciudad pierde la posibilidad de tener una Oficina Anticorrupción que controle y brinde transparencia para lograr una mejor calidad institucional”. – y remató-. “Porque la bandera de la lucha contra la corrupción se proclama, pero también se tiene que hacer carne en propuestas concretas”.