Después de que el senador jujeño Guillermo Snopek, del Frente de Todos, presentara un proyecto de ley para intervenir por un año al Poder Judicial de su provincia, el gobernador Gerardo Morales denunció que la iniciativa es parte de un embate para garantizar “la libertad de Milagro Sala y la impunidad”.
“El proyecto es totalmente inconstitucional, pretende designar un interventor que además pueda remover jueces sin un jury”, consideró el gobernador (que también es cuñado de Snopek, ya que está casado con su hermana). Luego ratificó que la líder de la organización social Tupac Amaru “está detenida por los delitos que ha cometido”. “Le ha robado al pueblo”, insistió.
Senado: Presentaron proyecto de ley para intervenir la Justicia jujeña
Numerosas voces del radicalismo salieron a cuestionar la iniciativa de Snopek como una maniobra para lograr la libertad de Milagro Sala, cuya condena fue ratificada hace pocos días, aunque el proyecto de ley no hace mención alguna a la dirigente social. También se evalúa que la iniciativa legislativa podría ser una herramienta de presión para lograr algunos votos del radicalismo que permitan aprobar en el Senado el pliego del juez Daniel Rafecas como Procurador General de la Nación.
En cualquier caso, después de hacerse público el proyecto el gobernador Morales recibió un claro respaldo de la Unión Cívica Radical y del resto de los partidos que integran Juntos por el Cambio, además de la solidaridad personal de numerosos dirigentes de la alianza opositora.
Desde la asunción de Alberto Fernández, Morales intentó construir una buena relación con la nueva administración nacional, particularmente porque Jujuy es una provincia que carga con serios problemas financieros, para los que requiere una constante ayuda de Nación. En algún momento se especuló con que la libertad de Sala podía ser una moneda de cambio en este sentido, pero en los últimos días quedó claro que el gobernador no está dispuesto a transigir en este tema en particular.