Este martes el ministro de Salud porteño Fernán Quirós brindó detalles de la situación sanitaria de la Ciudad en relación con la curva de contagios de coronavirus y confirmó la realización de un “intenso” operativo en la Villa 31, en colaboración con el Gobierno nacional, por el fuerte aumento de casos en los últimos días.
“Tuvimos unos cuatro o cinco días donde hubo un aumento importante de casos. Esta semana fue mejor en ese sentido”, explicó Quirós, quien también descartó que el Gobierno de la Ciudad avale la estrategia del contagio: “No creemos en la estrategia de contagio controlado. Lo que queremos es tener la menor cantidad de contagios posible”.
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El funcionario también confirmó que este martes se realizará un “intenso” operativo conjunto con el Gobierno nacional en la Villa 31 (en las villas porteñas ya se confirmaron 249 casos y 6 muertes) apuntando a la detección temprana de posibles casos asintomáticos: “Iremos manzana por manzana, casa por casa, para detectar a quienes tengan síntomas y así actuar rápidamente. Vamos a hacer una búsqueda activa de casos”. El llamado “operativo Detectar” (Dispositivo Estratégico de Testeo para Coronavirus en Terreno de Argentina) se iniciará en el barrio Padre Mugica (ex villa 31), en Retiro.
Más allá de que también se registró un fuerte crecimiento de los contagios en la 1-11-14 del Bajo Flores, el caso de la villa 31 es particularmente sensible en estos días luego de que distintos sectores políticos, sociales y de derechos humanos denunciaran la gravedad de un corte de agua que comenzó el pasado 25 de abril y se extendió casi una semana, dando lugar a acusaciones cruzadas entre AySA y el Gobierno porteño. Ante esta situación, el premio Nobel de la Paz argentino Adolfo Pérez Esquivel y la referente de Madres de Plaza de Mayo Nora Cortiñas anticiparon (en una carta abierta firmada por artistas, intelectuales y sindicatos) que denunciarían la situación ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
El ministro de Salud porteño también confirmó que este fin de semana debería llegar un embarque con material para testeos, que inmediatamente comenzará a aplicarse sobre el personal de salud y trabajadores de geriátricos.
