Con elogios a Javier Milei, Diego Santilli es el primer dirigente del PRO que salió a decir públicamente que se anota para la carrera a la gobernación en 2027. «Hay que ganarle al kirchnerismo», expuso el diputado nacional, quien sufrió un duro revés en la interna amarilla para quedarse con la candidatura a gobernador en 2023 contra Néstor Grindetti.
El exaliado de Horacio Rodríguez Larreta aseguró ser su «propia conducción política» y evaluó: «Yo creo que los dirigentes y los hombres tienen que hacerse cargo del trayecto, de su camino y de lo que le espera hacia adelante. Entonces, yo estoy dando una batalla en la provincia de Buenos Aires para ganarle al kirchnerismo en la Provincia».
Para dejar en el olvido la derrota del 16,25 por ciento en 2023, que lo dejó cuarto en posición de candidatos, esta idea ya comenzó a tomar forma al interior del partido amarillo en la Provincia de Buenos Aires con un megaencuentro en la ciudad de Lobos, que logró agrupar a legisladores nacionales, provinciales y dirigentes del espacio.
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Bajo ese marco, apuntó que “hay un gobierno de cambio que eligieron los argentinos, y ese cambio en Argentina necesita de un PRO fuerte y unido que pueda darle la fuerza necesaria para hacerlo realidad”.
Los elogios a Milei son varios. El legislador apuntó que «son los primeros 100 días de un gobierno que lo primero que evitó es una hiperinflación. La inflación galopaba en las primeras dos semanas de diciembre a un nivel interanual proyectado de 3.000%. Paró algo que iba a ser gravísimo para los argentinos, que era un 80% de pobreza. Es un gobierno que en los primeros 100 días puso en práctica lo que vino planteando en su campaña, que es ordenar las cuentas fiscales, gastar menos de lo que se ingresa, achicar los cargos políticos. Está en ese camino. Obviamente es un proceso doloroso y duro».
Consultado por Kicillof, expresó: «Yo no subestimaría al peronismo ni al kirchnerismo que ya demostró que se puede reinventar. No creo que Kicillof sea el único candidato. Sí creo que en la provincia de Buenos Aires hay un modelo, un sistema, una forma, que yo no comparto».
