Tal como habían anticipado los trabajadores estatales, el Gobierno Nacional firmó este jueves por la noche el decreto con el que oficializará el aumento salarial para los empleados públicos, que consistirá en una suma fija de 4 mil pesos, pagadera en dos cuotas.
Siguiendo la política de ir en favor de los sectores más postergados, dicha suma incluye sólo a aquellos que perciban ingresos de hasta 60 mil pesos en bruto. El primer tramo de 3 mil pesos se pagará con los salarios de febrero, mientras que los mil pesos restantes se cobrarán con los salarios de marzo.
Trabajadores estatales reclaman el mismo aumento salarial que se les otorgará a los privados
Dicho incremento alcanza a 268 mil trabajadores de la administración pública central, organismos descentralizados, empresas del Estado y personal civil de fuerzas Armadas y de seguridad en actividad. Quedan excluidos del aumento unos 112 mil estatales, por percibir cifras superiores al techo de 60 mil pesos, entre ellos los docentes universitarios nacionales que cuentan con una cláusula gatillo automática que el año pasado les garantizó (como a los maestros bonaerenses) aumentos por sobre la inflación.
Como en el caso de los trabajadores privados, el adelanto salarial será a cuenta de las paritarias de este año que, según le confirmó el Gobierno a representantes sindicales, serán convocadas en marzo. Según un estudio del Observatorio de Derecho Social de la CTA Autónoma, durante el macrismo los trabajadores estatales sufrieron una pérdida del 35% de su poder adquisitivo.
Esta medida forma parte del paquete previsto dentro de la Ley de Solidaridad Social y Reactivación productiva que obtuvo Fernández en el Congreso, y se publicará este viernes en el Boletín Oficial, a 30 días de la asunción del nuevo Gobierno.