Stornelli usa la “Operación Puf” como excusa para no declarar nuevamente

Basándose en la difusión mediática de las escuchas ilegales a ex funcionarios kirchneristas detenidos en Ezeiza, el fiscal Carlos Stornelli anunció que volverá a negarse a concurrir a la citación realizada por el juez federal de Dolores Alejo Ramos Padilla en el marco de la investigación de la red de espionaje ilegal por la que se encuentra detenido el falso abogado Marcelo D´Alessio.

Stornelli argumenta que los audios difundidos (mediáticamente bautizados como «Operación puf») prueban la existencia de un complot kirchnerista en su contra y que esto justifica su negativa a declarar ante Ramos Padilla. El fiscal, que ya faltó a cuatro citaciones y fue declarado en rebeldía, había sido citado nuevamente a declarar esta semana.

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Las escuchas difundidas son ilegales porque derivan de una investigación ordenada por el juez Federico Villena sobre el “rey de la efedrina” Mario Segovia y habían sido descartadas como irrelevantes para el caso. Los periodistas y el propio Stornelli dicen que le fueron entregadas las transcripciones y los audios de forma anónima, lo que confirma todo un entramado de relaciones con los servicios de inteligencia ya que esas escuchas debieron haber sido destruidas por orden del juez, pero lograron filtrarse desde el Poder Judicial hasta sus despachos.

El otro detalle llamativo es que las escuchas en realidad ni siquiera constituyen una novedad periodística, ya que habían sido aportadas como presuntas pruebas del complot contra Stornelli a pocos días de estallado el escándalo, dando incluso origen a causas judiciales iniciadas por Elisa Carrió, Maria Zuvic y Paula Oliveto, así como por el propio Stornelli. Constan varios intercambios de Oliveto con D´Alessio en el teléfono de este último.

Por último, la denuncia del presunto armado no es tal porque los hechos investigados en la causa que se originó con la denuncia del empresario Pedro Etchebest son anteriores a la fecha de las escuchas. Etchebest estuvo acumulando pruebas de los intentos de extorsión de D´Alessio a lo largo de varias semanas antes de presentar la denuncia judicial.

Los primeros intentos de extorsión sobre el empresario (para “borrarlo” de la causa de los cuadernos si conseguía dinero para arreglar con Stornelli) fueron hechos a fines de 2018, mientras que el viaje a Pinamar en el que se concretó el encuentro con D´Alessio y Stornelli fue el 8 de enero. La reunión fue filmada y presentada como prueba, lo que confirma que Etchebest ya venía acumulando material para la presentación judicial. Luego de ese encuentro D´Alessio le pide al empresario 300 mil dólares, presuntamente para el fiscal. En esos días Etchebest habló de la situación por la que estaba atravesando con un dirigente kirchnerista, por lo que no es extraño que el rumor de la inminente presentación contra Stornelli llegara a los ex funcionarios detenidos algunos días después (la fecha de las escuchas es el 18 y 19 de enero). La denuncia formal en sede judicial se concretó diez días después, el 28 del mismo mes.

Más allá de que no existe delito en esta sucesión de hechos, la defensa de Stornelli aprovechó la difusión mediática de las escuchas ilegales para dilatar aún más su presentación y pedir la indagatoria de los ex funcionarios que aparecen en los audios: Eduardo Valdés, Juan Pablo Schiavi, Roberto Baratta y Carlos Zelkovicz.

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