Alberto Fernández participó del V encuentro del Grupo de Puebla, a través de una videoconferencia desde la Residencia de Olivos, en el que pidió construir «un mundo más justo».
«La pandemia de coronavirus dejó al descubierto la desigualdad y que el capitalismo concentró, en muy pocos, grandes recursos, y pobreza en otros», reflexionó Fernández en la conferencia virtual.
Señaló que en América Latina no hay igualdad de oportunidades y que la meritocracia «no era el camino». «El más inteligente de los pobres tiene menos chances que el más mediocre de los ricos», graficó el jefe de Estado, quien postuló, en cambio, la «solidaridad» y la «inclusión».
«La desigualdad no es un buen camino para enfrentar situaciones críticas como estas y, en muchos lugares del mundo, la solidaridad quedó a un costado cuando debería ser el común denominador que nos una y vincule», argumentó.
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El Presidente entendió que «el mundo se ha dado vuelta y la economía cruje: está demostrado que el sistema económico mundial era tan débil que algo imperceptible a la vista humana (como el coronavirus) puede tirar abajo todas las estructuras económicas».
Luego, insistió en que «para que la economía pueda sobrevivir, necesitamos estructuras más solidas que se funden en principios de mayor igualdad y solidaridad; todo se cae rápidamente porque esas estructuras estaban basadas en el poder de muy pocos que no podían sostener el conjunto».
Fernández consideró que está en marcha un «proceso de transformación profundo» y pronosticó que, superada la pandemia, «el mundo no será el mismo», por lo que llamó a sostener medidas de cuidado y prevención hasta que se logre elaborar la vacuna contra la Covid-19.
