Los mandatarios se reunirán a finales de julio en la Casa Blanca. Entre los objetivos, el Presidente espera poder impulsar la llegada de nuevas inversiones estadounidenses.
El canciller, Santiago Cafiero, recibió al embajador de Estados Unidos en Buenos Aires, Marc Stanley, para comenzar a fijar las líneas de la reunión que mantendrán los presidentes Alberto Fernández y Joe Biden en la Casa Blanca a fines de julio.
Cafiero y Stanley conversaron sobre la amplia agenda bilateral, principalmente en materia económica, e intercambiaron puntos de vista sobre los temas destacados y de interés común de la realidad hemisférica y global.
De acuerdo a lo que se informó desde el Palacio San Martín, el canciller y el diplomático norteamericano «ultimaron detalles del encuentro bilateral, en un clima de entendimiento y respeto mutuo».
«El canciller destacó el nivel de la relación bilateral, que se despliega a través de una agenda extensa y diversa, y el diálogo franco y fluido que existe entre los dos gobiernos, al tiempo que resaltó que Estados Unidos es un socio fundamental para nuestro país en materia de inversiones, ya que es el primer inversor extranjero en la Argentina desde el año 2012, con un stock acumulado de 17.000 millones de dólares (IED)», remarcó el texto difundido.
Cafiero «propuso además impulsar una agenda específica para la llegada de nuevas inversiones de capitales americanos, para incrementar la oferta exportable de los productos argentinos y reducir el déficit comercial que el país tiene con Estados Unidos, siendo el tercer socio comercial actualmente».
El canciller afirmó que los logros alcanzados por la Argentina en la definición de su situación financiera internacional «ofrecen un contexto favorable para trabajar conjuntamente en la canalización de una nueva corriente de inversiones productivas en el país, especialmente en sectores clave como minería de litio, vehículos eléctricos, hidrocarburos, economía del conocimiento y energías renovables».
Cafiero y el embajador estadounidense destacaron «el rol de Argentina como proveedor estable de alimentos y energía y de este modo contribuir a la seguridad energética y alimentaria global».
«Ambos funcionarios aprovecharon la oportunidad para continuar el diálogo sobre temas estratégicos de la relación bilateral tales como la cooperación financiera, desarrollo de energías renovables, la importancia de promover la innovación tecnológica y la necesidad del fortalecimiento de la producción agroalimentaria en un contexto mundial complejo», finalizó el comunicado de la Cancillería.
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