Intendentes «independientes»: seis bonaerenses rompen con la dualidad y apuestan a una «tercera vía»

En medio de la crisis y la emergencia generadas por la pandemia que las recaudaciones de los municipios bonaerenses han caído más del 60% en promedio y la situación se dificulta hasta casi lo inviable en distritos en los que el presupuesto depende en parte de la coparticipación, por las características de cada distrito.

El Gobernador Axel Kicillof es destacado por propios y ajenos por su decisión de distribuir fondos entre los intendentes más allá de su color político y tiene en su ministra de Gobierno Teresa García su apoyo para el contacto permanente con los jefes comunales.

García «es fundamental» señalan los intendentes ante la consulta del rol de la ministra y lo fue también en la conexión entre intendentes que estaban en espacios que sentían no los representaban ni contenían. Así surgió el «grupo de los seis», conformado por jefes comunales que fueron electos (o reelectos) en sus territorios con un importante caudal de votos y que se mantienen muy cercanos al Gobierno provincial, pero sin terminar de alinearse.

El espacio apunta a ser contenedor de intendentes opositores que supieron referenciarse con el PRO y participar dentro de la alianza Cambiemos pero que, en este nuevo escenario político, decidan «reinventarse». A esto aspiran, principalmente, aquellos que no quieren trabajar con Jorge Macri como referente y también intendentes radicales que, más allá de la organicidad partidaria, se sienten «subvalorados» por los cambiemitas.

De esta línea vienen los dos intendentes bonaerenses del Partido Fe, que rompieron con Juntos por el Cambio, ante la falta de espacios que la alianza cambiemita habilitó para sus referentes.

Cecilio Salazar, el intendente de San Pedro y quien fuera además mano derecha de Gerónimo «Momo» Venegas en Uatre, atraviesa su segundo mandato tras haber sido electo con más del 56% de los votos. El jefe comunal de Necochea, territorio de Venegas por excelencia, se impuso con más del 59 por ciento de los votos. Se trata de Arturo Rojas, otro de los también presentes en el «G-6».

Además de estos dos intendentes del Partido Fe, se suma el único jefe comunal que ganó con una lista que lo llevaba a Roberto Lavagna como candidato a presidente, en Consenso Federal. Se trata de Guillermo Britos, que atraviesa su segunda gestión tras ser reelecto con más del 48% de los votos en Chivilcoy.

Carlos Sánchez, de Tres Arroyos, es en este grupo el «auténtico» vecinalista: cumple en estos momentos su quinto mandato, representando al Movimiento Vecinal Tres Arroyos, tras haber obtenido más del 44% de los votos en la que fue su última reelección habilitada por ley.

El intendente debutante de Salliqueló también lo hizo por el vecinalismo: Juan Miguel Nosetti obtuvo más del 36% de los votos con la boleta de la Unión Vecinal Salliqueló. El grupo se completa con Carlos Bevilacqua, quien cumple su segunda gestión en Villarino tras haber sido reelecto con casi el 50% de los votos por el espacio Acción por Villarino.

Unos y otros destacan, ante la consulta de Informe Político, que este G-6 es apenas «el piso» del espacio, y ya hay al menos otros cuatro intendentes en tratativas de sumarse al grupo que fue presentado oficialmente en una reunión presencial con el Gobernador Kicillof y que la prensa provincial bautizó como «vecinalistas».

Kicillof recibió a intendentes vecinalistas en La Plata

El principal problema que enfrentan los jefes comunales es el dilema territorial: cómo acomodar las alianzas en sus distritos. En Necochea, por ejemplo, Rojas sumó siete concejales propios a la composición del cuerpo deliberativo contra los tres que consiguió el Frente de Todos, y sigue con una mayoría que le permite gobernar cómodamente. Pero este espacio representa a Juntos por el Cambio en su conjunto y esta decisión del jefe comunal rompería también la alianza a nivel local

En San Pedro, en tanto, Salazar tiene 12 concejales que responden al oficialismo. O tenía. Las conversaciones y discusiones internas del espacio se vienen dando desde antes del anuncio público del G-6, cuando el jefe comunal les comunicó a los referentes del PRO y la UCR su decisión, en medio de este particular escenario político – económico. Si bien ambas fuerzas «entienden» la necesidad, aclaran que seguirán dentro de Juntos por el Cambio y ello hace peligrar la unidad del bloque.

Mientras tanto, este grupo de intendentes ya cuenta con el respaldo de legisladores nacionales y provinciales que ya han expresado abiertamente su postura. El diputado nacional Pablo Ansaloni también proviene del Partido Fe y fue incluso antes de asumir que anunció su salida del bloque de Juntos por el Cambio, lo que le valió el hashtag en Twitter #AnsaloniTraidor.

A este se suman legisladores provinciales: la diputada Natalia Sánchez Jáuregui, representante de la Quinta Sección Electoral por Necochea, de cercana relación con el intendente Rojas; María Fernanda Bevilacqua, hija del intendente de Villarino, que se sumó al bloque Frente de Todos pero que desde ese espacio acompaña la iniciativa de su padre; y Fabio Britos, hermano del intendente de Chivilcoy, diputado por la Cuarta Sección Electoral.

Los intendentes del G-6 coinciden en señalar que, «aunque hoy es ciencia ficción hablar de política, es necesaria una tercera vía» que se vaya consolidando pensando en el voto de una gran masa de personas que no comulguen con Juntos por el Cambio ni con el Frente de Todos.

Desde la gobernación, en tanto, este espacio representa lentamente y «por goteo», la salida de intendentes cambiemitas en búsqueda de otros espacios mucho más cercanos al actual oficialismo. Por ello también es que estos jefes comunales han visto garantizadas sus obligaciones monetarias locales en el marco de la crisis que atraviesan cada uno de sus distrtios.

Poco se puede proyectar en el escenario actual respecto a las posibilidades reales de este espacio recientemente creado pero unos y otros apuestan a consolidar el sector, sumando más voluntades en los próximos meses.

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