Con una elección en veremos, debido a una movida judicial opositora, Juan Román Riquelme y Mauricio Macri se juegan varias cosas en el comicio que definirá quien conducirá el club para el período 2023 – 2027, con al menos cuatro claves.
El primer eje de la contienda pasa por una cuestión personal: el ídolo como el ex mandatario siempre tuvieron chispazos, por distintas cuestiones que ya pasan al terreno personal. Cuando jugaba, Riquelme nunca soportó el manejo «empresarial» y el poco tacto al momento de negociar contratos que tuvo el ejecutivo que luego terminaría como presidente de la Nación.
Y el entonces dirigente xeneize jamás avaló modos y pedidos del 10, algo que se profundizó con el correr del tiempo y que se vio a todas luces en el comienzo de la gestión Daniel Angelici, que marcó el punto final del ciclo del ahora parte del consejo de fútbol de la entidad boquense.
El otro eje de la elección está colocado en lo que representa el mundo Boca: una vidriera y caja a gran escala. A Macri por caso le sirvió para entablar contactos, profundizar relaciones y establecer una red que luego le sirvió para pegar el salto a la política. Ya lo dijo Mario Pergolini, hoy macrista y en busca de venganza tras haber pasado por las filas del actual oficialismo: «El club te permite conocer y vincularte con personas para hacer distintas cosas, como gente de Qatar Airways por ejemplo. Sin Boca, eso sería imposible».
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En el caso del actual vicepresidente, quien dijo que no tiene aspiraciones en otras esferas, la institución le calzó como anillo al dedo para asegurarle un puesto a muchísima gente de su confianza, como ex jugadores, amigos, que forman parte del consejo de fútbol y de las divisiones inferiores del club.
La justicia ya tiene un rol preponderante y ahí saca ventaja la oposición, con varios referentes con aceitados vínculos con el poder, desde el propio Macri hasta Angelici. Hoy, por caso, el fallo que emitieron desde el Juzgado Nacional de Primera Instancia en lo Civil N° 11, a cargo de la jueza Abrebaya, comunicó: «la suspensión del acto de elecciones de autoridades de la Asociación Civil Club Atlético Boca Juniors a celebrase el próximo día 2 o 3 de diciembre de 2023 y ello hasta tanto se defina en su caso judicialmente la situación de irregularidades detectadas prima facie del padrón mediante la acción correspondiente de depuración que manifiestan los accionantes como objeto tendrán, para lo cual deberán dar constancia de su inicio».
En concreto, según la resolución, el acto eleccionario fue suspendido por supuestas irregularidades en el padrón, con socios que pasaban de adherentes a activos prácticamente sin espera y en cantidades desproporcionadas respecto de aquellos que perdían su condición social.
«Román, tenemos la oportunidad de terminar con tantas mentiras que estás diciendo. Si vos querés realmente una elección transparente, corre a esos señores que entraron al padrón cuando no tenían que haber entrado, violando los derechos de aquellos que venían pagando la cuota adherente con la esperanza de un día ser socios. Corré a estos 13.000 y votamos el domingo, que es lo que todos queremos», sostuvo Macri, hablándole directamente a Riquelme.
En esa línea, el ingeniero y candidato a vice de la oposición de Boca, agregó: «Y ahí veremos si la gente quiere continuar con esta forma de conducir al club, o volver a lo que supimos tener, que es un club profesionalizado, organizado, poniéndolo por encima de todos».
Por último, la situación del fútbol puede llegar a pesar en la elección. El club no clasificó a la Copa Libertadores del año próximo, perdió la final del certamen con el Fluminense y no logró celebrar ningún título este año, con muchos altibajos y cambios en la dirección técica. La oposición se encargó de resaltar eso durante toda la campaña, remarcando logros que dicho sea de paso son antaños: la última Libertadores data de 2007 y Angelici quedó marcado por el episodio de Madrid, con pedidos ante la Conmebol que no prosperaron.
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