El juez federal Claudio Bonadio decidió enviar a juicio oral a Julio De Vido y a Claudio Uberti en un expediente en el que se indagan presuntos sobornos vinculados a las concesiones de los corredores viales.
Esta causa es un desprendimiento de la causa de “cuadernos” en la que se cerró la investigación con esta nueva disposición del magistrado, que dispuso que “la maniobra ilegal realizada en el otorgamiento y control de la obra pública en la Dirección Nacional de Vialidad adquirió una magnitud considerable” y sucedió durante el periodo de cuatro años que comprende entre el 2003 y el 2007 en el OCCOVI, el órgano encargado de controlar los concesionarios viales.
Las concesiones investigadas fueron el Acceso Norte (Autopistas del Sol), Acceso Oeste (Grupo Concesionario del Oeste), Acceso Riccheri (AEC S.A) y la Ruta 8 tramo Pilar a Pergamino, cuyo concesionario era Corredor Americano.
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Bonadio cree, tal como indica su resolución, que empresarios pagaron coimas para el mantenimiento de tales concesiones, el reparto de los fondos concentrados en la Unidad de Coordinación de Fideicomisos –UCOFIN- o bien la no imposición de sanciones por parte de las autoridades competentes.
Uberti, en este marco, fue imputado colaborador y confesó que De Vido le había dicho que “el presidente no va a firmar los contratos ni en pedo, porque vos hiciste las cosas demasiado bien y no arreglaste la guita con la gente, no los va a firmar ni en pedo y te va a hacer cagar. Tenés que llamar a los empresarios y decirles que pongan, te van a llorar, pero vos deciles que pongan porque si no el presidente no va a firma[r], si no renunci[á]”.
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