Después de la carta pública con la que la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner cargó en muy duros términos contra el presidente Alberto Fernández, el Jefe de Gabinete Santiago Cafiero y la política económica de ajuste fiscal aplicada durante el último año y medio, las reacciones de dirigentes del oficialismo y la oposición no se hicieron esperar.
Todavía son muy pocas las voces del oficialismo que salieron a tomar posición respecto del texto de Cristina, que generó un terremoto político con pocos precedentes y volvió a abrir heridas internas que desde ayer por la tarde estaban buscando cerrarse con gestos de distensión entre los distintos sectores que componen la alianza de Gobierno. Desde Casa Rosada trascendió que el Presidente se enteró de la misiva también por redes sociales, ya que no hubo ningún aviso ni consulta previa al respecto, dando cuenta de lo dañada que quedó la relación en las últimas horas.
La diputada Gabriela Cerruti avaló el texto y lo compartió afirmando “Unidad en las convicciones y la mirada en el pueblo, siempre”. Lo mismo hizo la senadora kirchnerista Juliana Di Tullio (que asumió hace pocas semanas en lugar de Jorge Taiana, que pasó al Ministerio de Defensa), agregando: “Quien quiera oír que oiga”.
El referente de los trabajadores de la economía popular Juan Grabois apoyó la línea económica de la carta: “Con esos dos puntos del PBI se podría sacar de la pobreza y la indigencia a millones; podrían garantizarse mejores jubilaciones, un salario universal de reconstrucción para los trabajadores informales y un plus mensual para los trabajadores formales de bajos ingresos”. E insistió: “Se podría realizar un ‘plan marshal’ criollo, un plan de desarrollo humano integral con tierra, techo y trabajo que le devuelva con realizaciones efectivas y tangibles la esperanza a nuestro pueblo. Pero esos dos puntos del PBI los pide el FMI. Ahí está el dilema, ahí el problema”.
Por el lado de la oposición, todo fueron durísimos cuestionamientos a la posición de la vicepresidenta. El titular de la UCR y diputado nacional Alfredo Cornejo manifestó desde sus redes: “Leí la carta y no puedo estar más que asombrado. Su prosa sigue intacta de relato, siempre culpando al otro. La vicepresidenta no actúa ‘sinceramente’ sino justificándose. Es hora que se haga cargo de su decisión y lleve tranquilidad a los argentinos”.
Leí la carta de @CFKArgentina y no puedo estar más que asombrado. Su prosa sigue intacta de relato, siempre culpando al otro. La vicepresidenta no actúa “sinceramente” sino justificándose. Es hora que se haga cargo de su decisión y lleve tranquilidad a los argentinos
— Alfredo Cornejo (@alfredocornejo) September 16, 2021
El ex ministro de Transporte de Cristina Florencio Randazzo, cuya agrupación sufrió una clara debacle electoral en las primarias del domingo, consideró: “Empujar al país a una crisis institucional, solo agravará los problemas y no resolverá ninguna de las urgencias de los argentinos. Las luchas de facciones dentro de un gobierno traen los peores recuerdos. Esas disputas siempre terminaron mal”.
La diputada nacional y presidenta de la Coalición Cívica-ARI de la Ciudad de Buenos Aires Paula Oliveto añadió: “Sinceramente, estas personas se pasan de cínicas e irresponsables. Hace 2 días que nos tienen a los argentinos angustiados mirando su novela de poder y traiciones. Laburen, que el pueblo la está pasando mal”. El titular de la CC-ARI a nivel nacional Maximiliano Ferraro fue aún más contundente: “Sin palabras. Todo demencial. Una Nación entera rehén de sus internas facciosas”.
En lugar de redefinir el rumbo del país y traer calma, estresan y confunden aún más a la sociedad en medio de una crisis. Una irresponsabilidad sin precedentes.
— Facundo Manes (@ManesF) September 16, 2021
En el mismo sentido, el ex ministro del Interior de Cambiemos Rogelio Frigerio, precandidato a diputado nacional de Corrientes de gran desempeño en las PASO, opinó: “Acá lo que prima es echarle la culpa al otro. Es tratar de zafar de esta situación delicada que ellos mismos generaron con malas políticas y mala gestión. Atenta contra la gobernabilidad. No tiene nada que ver con las preocupaciones de los ciudadanos”.
El precandidato radical Facundo Manes también se pronunció en duros términos sobre la carta: “En lugar de redefinir el rumbo del país y traer calma, estresan y confunden aún más a la sociedad en medio de una crisis. Una irresponsabilidad sin precedentes”.
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